RESPUESTA A JORDI SALVADOR

Estimado Jordi Salvador, podemos comprender pero no justificar la ofuscación que lo condujo a poner en palabras el sentirse al descubierto. Y se equivoca porque lo dejan más desnudo. De nuestra parte, Espineta amb Caragolins, que usted sea mencionado en frecuentes notas –la verdad son muchas y de no revertir sus posiciones seguirá estando entre los primeros del ranking-, no aparece por ser usted Jordi Salvador, sino por las ideas que usted transporta y pone en palabras. Ideas que no compartimos, porque expresan realidades, miradas, desde un punto de vista, digamos, interclasistas, ciudadanistas, paternalistas, y en definitiva: burguesas, que nada tienen que ver con los intereses inmediatos, mediatos y a largo plazo de los y las trabajadoras afiliadas o no al sindicato UGT , que usted gusta llamar de clase.

Lo suyo del BCN World nos pareció que busca inspiración en el refranero popular, ese que dice: “A Dios rogando y con el mazo dando”, porque brega de palabra por la derogación de todas las contrarreformas laborales y aconseja a las y los trabajadores, victimados por esas mismas contrarreformas, que denuncia a que se bajen los pantalones por mendrugos de pan para levantar un complejo de timba, prostitución y toda la degradación que conlleva ese mundo para nada desconocido gracias a la “popularidad” de Las Vegas, EE.UU.. Que de eso se trata, ese emprendimiento que usted, sin observable prurito de su parte, va pregonando.

Dicho esto es momento de aclarar, para usted y para todos y tadas aquellas que habiten idéntica confusión o desinformación que nuestra revista Espineta amb Caragolins, no es el órgano de Amigos del CHE-Tgn, ni de la Izquierda Independentista, ni de CGT. Quienes la hacemos, algunas y algunos, somos militantes de distintas corrientes políticas de izquierda, otrosy otras compañeras conocedoras de temas sociales y que además les gusta el oficio de escribir, otras y otros dibujar, algunos y algunas el trabajo de maqueteado, todos y todas, sin excepción preocupados y preocupadas, pero sobre todo OCUPAD@S en combatir consecuentemente todo tipo de explotación y opresión, construimos un frente a partir de los ideales del antiimperialismo, autodeterminación de los pueblos, contra la opresión patriarcal y el capitalismo.

Lucha, que como dijo Mao Tsé Tung (tome nota: es la primera vez que lo invocamos), la lucha de los explotados, explotadas, y oprimidas, aprimidos, no es sólo contra la burguesía, sino que también consiste en luchar por erradicar las ideas incorrectas en el seno del pueblo. Ideas que tienen origen en la ideología dominante, la burguesa, pero que llegan a los trabajadores vía personeros concientes o no de su rol que las esparcen al interior de la clase obrera.

Por último, concientes de la infinitesimal, pero importante parte que asumimos en la ciclópea tarea de construir una identidad de clase obrera que alcance la cota de consistencia necesaria que le permita pararle los pies al enemigo de clase, la burguesía, no tendremos complejo alguno en, como dice el tango Cambalache: “poner la biblia junto al calefón”. ¿Comprende, estimado Jordi, por que le hacemos “compartir cartel” con Marx, Lenín y el CHE y, ahora, con Mao?

Cordialmente.

Espineta amb Caragolins

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